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Firme compromiso de PSOE, PP, Sumar, ERC y BNG contra la deforestación

  • Con ocasión de las elecciones generales y coincidiendo con el día de la entrada en vigor del Reglamento de la UE sobre productos libres de deforestación, la Alianza Cero Deforestación organizó ayer un debate político con el título “La lucha contra la deforestación en las elecciones del 23-J” con la participación de PSOE, PP, SUMAR, ERC y BNG.
  • Todos los grupos políticos participantes mostraron su apoyo unánime para que el Reglamento de la UE amplíe la protección a biomas bajo la clasificación de “otras zonas boscosas” como el Cerrado, la Caatinga, el Chaco o el Pantanal.
  • Los  asistentes destacaron el carácter pionero de este Reglamento y, de llegar al Gobierno, se comprometieron  a trabajar en una  aplicación coherente del mismo, con recursos presupuestarios necesarios para que la autoridad competente pueda realizar sus funciones de control correctamente.

En el debate político“La lucha contra la deforestación en las elecciones del 23-J”, en el que participaron PSOE, PP, SUMAR, ERC y BNG, los partidos dieron a  conocer sus compromisos para frenar la deforestación, proteger los bosques y los ecosistemas, precisamente en el día que entró en vigor el Reglamento de la UE sobre productos libres de deforestación (EUDR).

Con esta nueva ley, las empresas tendrán que demostrar que sus importaciones de carne de vacuno, soja, aceite de palma, caucho, cacao, café, madera y algunos de sus productos derivados están libres de deforestación. De esta manera la UE persigue reducir su contribución a las emisiones de gases de efecto invernadero y a la pérdida de biodiversidad global.

Todos los representantes políticos respaldaron la demanda de la Alianza Cero Deforestación para  que el Reglamento amplíe la protección a otros ecosistemas esenciales como la sabana del Cerrado, la Caatinga, el Chaco o el Pantanal, que a nivel global están sufriendo el avance sin precedentes de la agroindustria. Para ello el primer paso será apoyar en la revisión de esta norma, prevista en un año, la inclusión en su ámbito de aplicación de “otras zonas boscosas”.
En palabras de Eva Patricia Bueno, candidata del PSOE al Senado, “es necesario trabajar en un modelo productivo que no vaya contra la naturaleza”. Además, destacó el papel que jugará esta norma en este sentido.

Por su parte, Diego Gago, representante del PP en la mesa, comentó que este Reglamento “representa una victoria medio ambiental  de la UE”. Su partido  apoyó ya en la última legislatura  la Propuesta No de Ley presentada por ERC para que este Reglamento durante el periodo de negociación fuese ambicioso.
Paz Serra, candidata de Sumar al Congreso,  subrayó el papel decisivo de la población europea   para avanzar en la legislación medioambiental. Para la candidata, “la deforestación nos enfrenta con la huella de consumo en España en la que hay que incluir también las importaciones de materias primas y productos”.

María Dantas, candidata al Congreso por ERC,  indicó que su partido seguirá apoyando por la vía parlamentaria que se frene la deforestación, como ya hicieron al presentar en la pasada legislatura la PNL en relación con este Reglamento.

Para el candidato al Congreso por el BNG, Nestor Rego, es necesario el máximo soporte en la implementación del Reglamento y, a la hora de designar la autoridad encargada de controlar la exigencias de esta legislación, hay que actuar respetando los plazos y las competencias de las administraciones autonómicas.

Durante el acto la Alianza Cero Deforestación presentó sus demandas para que esta nueva legislación garantice a los consumidores europeos que los productos que compran no destruyen y degradan los bosques. Según sus representantes, “es necesario el compromiso al más alto nivel y que los Estados miembros empiecen a trabajar en la implementación desde su entrada en vigor”.

Antes del próximo 29 de diciembre, los gobiernos  de los Estados miembros  tienen que designar una autoridad competente dotada de los poderes adecuados, independencia funcional y con  los recursos necesarios para asegurar el adecuado cumplimiento del Reglamento. En el caso de España, debería haber una coordinación a nivel estatal entre el ministerio que ostente las competencias en materia de medio ambiente con los departamentos que tengan esa responsabilidad dentro de cada comunidad autónoma.

También se tendrá que adoptar el marco normativo e institucional para la correcta aplicación y cumplimiento de la norma en relación al régimen sancionador, los planes anuales de control, los mecanismos de comunicación con la autoridad aduanera, la coordinación y cooperación entre autoridades competentes o la transparencia en los controles realizados.

Las organizaciones integrantes de la Alianza proponen contar con una ley estatal específica de lucha contra la deforestación para facilitar y unificar bajo una única regulación todas estas exigencias derivadas del Reglamento.

Por otro lado, en el debate  los partidos políticos también expusieron sus propuestas para los sectores agropecuarios e industriales, estrechamente ligados a la importación de las materias primas asociadas a la deforestación en terceros países. Es el caso de la fabricación de piensos para alimentación animal cuya demanda ha aumentado de la mano de la expansión de la ganadería industrial, o los biocombustibles a base de aceite de palma y soja, que generan tres y dos veces más emisiones que el diésel fósil.

En relación con la ganadería industrial, para Sumar es imprescindible el apoyo a la ganadería extensiva para promover la producción autóctona y los sistemas alimentarios sostenibles. El PSOE destacó su compromiso con la agricultura familiar y la circularidad de la economía. BNG apoyaría una moratoria a las licencias a las explotaciones ganaderas industriales intensivas y, en esa misma línea, la representante de ERC propuso, además, reducir la cabaña ganadera en intensivo.

En cuanto a los biocombustibles, el representante del PP planteó que hay margen para otros combustibles, como los fabricados a base de aceite usado, que no impliquen deforestación y otros problemas. Por su parte el BNG recordó que su partido ya ha pedido con anterioridad en la Ley del cambio climático que se prohíban los cultivos energéticos. Para ERC será clave la eliminación del uso de soja y aceite de palma en los biocombustibles.

El Parlamento Europeo y el Consejo de la UE aprueban una ley pionera para detener la deforestación

  •  La Alianza Cero Deforestación valora positivamente la aprobación del Reglamento para frenar la deforestación importada y recuerda que es el primer paso para acabar con la destrucción de ecosistemas en el mundo.
  • El éxito de este Reglamento dependerá de controles efectivos en cada Estado y que las autoridades responsables de los mismos apliquen sanciones realmente disuasorias.

Hoy, el Consejo de la Unión Europea, tal y como ya hizo el Parlamento Europeo el pasado 19 de abril, ha aprobado el Reglamento relativo a la comercialización en el mercado de la UE y a la exportación desde el mismo de determinadas materias primas y productos derivados asociados a la deforestación y la degradación forestal. Esta nueva regulación requerirá que las empresas demuestren que sus productos no han contribuido a la destrucción de los bosques si quieren venderlos en el mercado de la UE.

La Alianza Cero Deforestación, de la que forman parte Amigos de la Tierra, Ecologistas en Acción, Coordinadora Estatal de Comercio Justo, Federación de Consumidores y Usuarios (CECU), Mighty Earth, Greenpeace, SEO/BirdLife y WWF, aplaude esta votación. No obstante, recuerda a la Comisión de la UE y a los Estados miembros que esta decisión marca solo el comienzo, y que será la ambición y el rigor en la aplicación de la ley la que dará los resultados esperados de frenar la deforestación inducida por el consumo de materias primas de la UE.

Las importaciones agrícolas a Europa son las segundas responsables de la deforestación global en el mundo, después de China. La agricultura industrial impulsa más del 90 por ciento de la deforestación, según un estudio publicado en la prestigiosa revista Science.

En palabras de la Alianza Cero Deforestación “este es un día histórico para los bosques del mundo. Por primera vez los operadores agroindustriales y otras empresas en su cadena de suministro deberán demostrar que sus importaciones de carne de vacuno, soja, aceite de palma, caucho, cacao, café, madera y algunos de sus productos derivados están libres de deforestación. Esta es también una buena noticia para consumidoras y consumidores que, conscientes de la gravedad del problema, han exigido de manera constante a los gobiernos y las empresas que mantengan los productos que causan la destrucción de los bosques fuera de sus cestas de la compra”.

Para las organizaciones ecologistas, el trabajo no ha terminado. La Comisión de la UE necesita evaluar e incluir cuanto antes otras materias primas como el maíz u otros tipos de carne y ecosistemas críticos como praderas, turberas y humedales, “una medida que hubiera mejorado sensiblemente el Reglamento”.

Un ejemplo de esta situación es el caso de biomas como el Cerrado, que queda casi en su totalidad fuera del ámbito de aplicación de esta regulación y, sin embargo, es donde se produce el 52% de la soja brasileña y la deforestación. También es donde la conversión de tierras alcanzaron su máximo de siete años en 2022, cuando se perdieron 10.689 km2.

Al mismo tiempo, la Amazonía registró en abril de 2023 una disminución de bosque en 287,7Km2, un 72% más bajo que hace un año. De ahí la urgencia de que en el plazo de un año desde su entrada en vigor, tal y como prevé la ley, se evalúe positivamente la incorporación de ecosistemas bajo la clasificación de otras tierras boscosas. Esto permitiría aumentar considerablemente la protección de espacios naturales como el Cerrado y otros que a nivel global están sufriendo el avance sin precedentes de la agroindustria.

Según el informe “Evaluación de los recursos forestales mundiales 2020” de FAO, en el mundo existen 977 millones de hectáreas que se clasifican como otras tierras boscosas.

Deberes para el Gobierno y las comunidades autónomas

El Reglamento prevé que, para un control efectivo de las materias primas que se importan y comercializan en el mercado de la UE, los Estados miembros deberán designar autoridades competentes en cada país, además de publicar su régimen sancionador.

España es, dentro de la UE, uno de los puntos de entrada más importantes de algunas de las materias primas que recoge el Reglamento, como la soja que se destina a la alimentación animal. Por este motivo, es esencial como punto de partida una buena configuración de la autoridad competente responsable de los controles, tanto en su dimensión estatal como autonómica, con recursos económicos, humanos y técnicos.

Las organizaciones señalan algunos aspectos que contribuirían a paliar la sensación de dejadez institucional e impunidad durante la aplicación del Reglamento para combatir la tala ilegal (un reglamento aprobado en 2013 y que fue la antesala de este nuevo Reglamento que lucha contra la deforestación) tales como:  la homogeneidad en la designación de los órganos competentes a nivel autonómico; mayor coordinación y cooperación entre estas autoridades; transparencia en los controles realizados; o una aplicación efectiva del régimen sancionador.

En ese sentido, la Alianza Cero Deforestación reclama al Gobierno y a las comunidades autónomas, que “garanticen en el ámbito de las administraciones públicas de su competencia, los recursos necesarios, para la correcta implementación y el cumplimiento del Reglamento. En paralelo se debería trabajar en una ley estatal específica de lucha contra la deforestación para facilitar y unificar bajo una única regulación las exigencias derivadas del Reglamento”.

Nueva alianza de organizaciones españolas para detener la deforestación en el mundo

Amigos de la Tierra, Ecologistas en Acción, Federación de Consumidores y Usuarios (CECU), Greenpeace, Mighty Earth, SEO/BirdLife, WWF, Coordinadora Estatal de Comercio Justo y Carro de Combate han presentado hoy en Madrid la Alianza Cero Deforestación.

En las últimas décadas la deforestación y la degradación forestal siguen siendo un problema alarmante, lo que contribuye a la actual pérdida de biodiversidad. La expansión agrícola sigue siendo la principal causa —en torno al 80 %— de la deforestación y fragmentación del bosque y la pérdida asociada de biodiversidad forestal, principalmente en las regiones tropicales.

En vísperas del Día Mundial de los Derechos del Consumidor (15 de marzo) y el Día Internacional de los Bosques (21 de marzo), con el objetivo de promover un consumo responsable en España y en la UE que evite la destrucción de hábitats naturales, y en especial de los bosques, se ha presentado la Alianza Cero Deforestación.

La Alianza está formada por Amigos de la Tierra, Ecologistas en Acción, Federación de Consumidores y Usuarios (CECU), Greenpeace, Mighty Earth, SEO/BirdLife, WWF, Coordinadora Estatal de Comercio Justo y Carro de Combate y su objetivo es la creación de un espacio para trabajar de forma conjunta contra la deforestación mundial.

Durante la presentación Ana Echenique, presidenta de CECU, ha declarado que “jamás debemos dejar de exigir una legislación y unas políticas claras y concretas que conviertan la mala praxis en delito y la correcta gestión en norma. La Alianza intentará llegar a la ciudadanía para que tome conciencia de la importancia de su papel, para que sea crítica y para que no sea cómplice de la deforestación”.

Hasta la fecha estas organizaciones han trabajado durante la tramitación del Reglamento de Deforestación importada, con el objetivo de minimizar la contribución de la UE a la deforestación y degradación forestal global debido al comercio y consumo de determinadas materias primas (aceite de palma, madera, soja, vacuno, cacao, café, caucho, carbón vegetal y algunos de sus productos derivados como muebles, papel impreso o cuero pero no el biodiesel).

Durante la presentación, Adriana Ramos, coordinadora del Programa de Política y Derecho del Instituto Socioambiental (ISA) de Brasil, se ha mostrado muy preocupada por la violación de derechos humanos vinculadas al agronegocio, por la utilización de los pesticidas. En su declaración ha añadido: “No habrá espacio para el crecimiento de mercado en base al acuerdo”.

“La firma de este acuerdo va a empeorar la situación de las comunidades indígenas, que viven al lado de plantaciones de soja que se fumigan y que por tanto, se ven en la necesidad de migrar de estas comunidades”, ha añadido Sergio Rojas, miembro del pueblo indígena Qom del Chaco argentino. Asimismo, se ha referido a la crisis climática que está atravesando su país y ha puesto énfasis en que “no se está discutiendo la Ley de Humedales en Argentina porque el objetivo es producir más, deforestar más”.

Tanto Sergio Rojas como Adriana Ramos han celebrado la aprobación del Reglamento pero han alertado de que que tanto en Argentina como en Brasil la ciudadanía no tiene casi información ni del reglamento ni de las negociaciones entre la UE y Mercosur para alcanzar un acuerdo de consumo. Se trata de un tema muy relevante ya que existe un riesgo que el nuevo reglamento aprobado sirva para justificar ambientalmente el acuerdo UE-Mercosur.

Cuando las nueva norma entre en vigor, todas las empresas deberán llevar a cabo una “estricta diligencia debida” si colocan en el mercado de la UE o exportan de él productos básicos considerados clave en la deforestación mundial. Estos productos básicos se han elegido sobre la base de una evaluación de impacto que los identifica como el principal impulsor de la deforestación debido a la expansión agrícola, aunque a juicio de la Alianza es necesario ampliar a la mayor brevedad la lista de productos.

La Alianza Cero Deforestación ha señalado que ahora es necesario trabajar en dos ejes prioritarios: 1) Desarrollar los mecanismos que permitan una adecuada aplicación de la norma en España, en la que será fundamental la creación y puesta en marcha del sistema de autoridad competente; y 2) Ampliar la lista de productos y de hábitats protegidos en la revisión del Reglamento que se llevará a cabo en dos años.

Web de la Alianza Cero Deforestación: https://alianzacerodeforestacion.org

Foto: Deforestacion-tropical-©Wikicommons_Daniele-Gidsicki

La Comisión de Medio Ambiente del Parlamento Europeo apoya una ley de deforestación más ambiciosa

Los eurodiputados de la Comisión de Medio Ambiente, Salud Pública y Seguridad Alimentaria (ENVI, por sus siglas en inglés) del Parlamento Europeo han apoyado hoy  una ley de deforestación de la UE más ambiciosa, que mejora algunas debilidades de la propuesta inicial planteada por los ministros de Medio Ambiente hace dos semanas. WWF considera un avance la propuesta de los eurodiputados, y espera que en la votación del pleno del Parlamento Europeo, que se celebrará el 12 de septiembre, se amplíe la ambición para asegurar unas cadenas de valor libres de deforestación y violación de los derechos humanos.

«La votación de hoy en la Comisión de Medio Ambiente envía un mensaje de esperanza sobre una posible ley que pueda garantizar que las importaciones europeas no contribuyan a agravar la deforestación global. Pero tenemos que esperar hasta septiembre, cuando se vote en el pleno del Parlamento Europeo, para ver si realmente hay un avance o un mal resultado”, afirma  Anke Schulmeister – Oldenhove, responsable de políticas forestales de la Oficina de Política Europea de WWF.

Los eurodiputados de la Comisión de Medio Ambiente del Parlamento Europeo han conseguido mejorar algunas debilidades de la propuesta inicial. En el texto votado hoy, se da más fuerza a la definición de «degradación forestal», asegurándose de que la nueva ley cubre más naturaleza y aumentando el número de controles para las empresas y también protegiendo mejor los derechos de los pueblos indígenas y locales. Estas enmiendas se ajustan a las demandas ciudadanas de una ley ambiciosa.

La nueva propuesta incluye «otras tierras boscosas», como espacios con cobertura de arbustos o matorrales, pero todavía queda un amplio margen para disminuir la amenaza de la deforestación sobre otros ecosistemas importantes, como las sabanas y las turberas. Los eurodiputados también han pedido a la Comisión Europea que presente una evaluación de impacto en el plazo de un año desde la entrada en vigor de la ley.

En cuanto al ámbito de aplicación de la ley de deforestación de la UE, los eurodiputados proponen incluir la carne de oveja, cabra y cerdo, las aves de corral, los productos a base de aceite de palma, el caucho y el maíz.  Y contemplan incluir productos derivados de la madera, el carbón vegetal y los productos impresos. Sin embargo, se han dejado fuera de esta regulación los instrumentos musicales, que constituyen un producto importante.

Por otro lado, se incluyen más controles en la propuesta del Parlamento Europeo y  un aumento de las multas y sanciones a las empresas. Asimismo, la Comisión también votó a favor de la aplicación de esta ley en el sector de las finanzas, enviando un fuerte mensaje para frenar la financiación de las empresas que están destruyendo los bosques.

“Todavía queda trabajo por hacer para mejorar esta propuesta y volverla más ambiciosa, pero avanzamos en la dirección correcta”, concluye Anke Schulmeister-Oldenhove, responsable de políticas forestales de la Oficina de Política Europea de WWF. El pleno del Parlamento Europeo votará su posición final durante la semana del 12 de septiembre.

Europa es uno de los mayores impulsores de la deforestación global en el mundo, sólo superado por China. La UE es responsable del 16% de la deforestación tropical vinculada al comercio internacional a través de las importaciones de productos básicos como la carne de vacuno, la soja, el aceite de palma, el caucho, la madera, el cacao y el café y sus productos derivados. Mientras, España es el tercer país de la UE con mayor responsabilidad en la deforestación de los bosques tropicales.

Nylva Hiruelas | WWF

Greenpeace denuncia en el Consejo de la UE la deforestación alarmante

Seis escaladores de Greenpeace han escalado esta mañana la fachada del edifico Europa, la sede del Consejo de la UE en Bruselas, Bélgica, para mostrar un contador a tiempo real con la cantidad de bosque destruido en todo el mundo mientras los ministros de medio ambiente se reunían para discutir una propuesta de ley para abordar la deforestación provocada por la importación de materias primas desde la UE. Así, durante su meeting, estimado en 90 minutos, se destruyó en el planeta un área de bosque como la mitad de la ciudad de Bruselas, 1750 hectáreas.

Los ministros de Medio Ambiente están discutiendo sus posiciones sobre una propuesta de ley presentada en noviembre de 2021 por la Comisión Europea para reducir la contribución de la UE a la destrucción de los bosques. El contenido de la propuesta ha sido criticada por no proteger adecuadamente los derechos humanos, no brindar protección a otros ecosistemas de alto valor para la conservación, por omitir imponer obligaciones al sector financiero y dejar fuera muchos productos que tienen un alto impacto en la naturaleza, como carne de cerdo, pollo, maíz y caucho. Las corporaciones están presionando contra los requisitos para rastrear los ingredientes de sus productos hasta el lugar exacto donde se cultivaron los alimentos o pastaron los animales, y los gobiernos europeos de países ricos en bosques amenazan con socavar partes de la ley para proteger a sus propias empresas forestales.

Sini Eräjää, activista de agricultura y bosques de Greenpeace UE, ha comentado: “La demanda del mercado europeo de materias primas está provocando la destrucción de ecosistemas vitales para el planeta. Tenemos la oportunidad de poner fin a la responsabilidad de la Unión Europea en este grave problema, ofreciendo garantías a la ciudadanía de que nada de lo que hay en su cesta de la compra está relacionado con la destrucción de la naturaleza o los abusos de los derechos humanos. En lugar de escuchar las demandas de la industria para descafeinar la ley, los ministros deben asegurarse de que todos los productos que puedan proceder de la destrucción de los ecosistemas pueden rastrearse hasta la parcela de tierra donde se produjeron y proteger los bosques no solo de la tala para la agricultura sino también de la degradación de los bosques”.

En 2020 el planeta perdió 51 millones de hectáreas de bosque, un área del tamaño de un campo de fútbol cada dos segundos, principalmente por la expansión de la agricultura industrial, muchos de cuyos productos se consumen en Europa.

Greenpeace hace un llamado a los ministros para que solucionen las lagunas y puntos débiles de la propuesta de ley, en lugar de debilitarlo aún más y garantizar que todos los ecosistemas estén protegidos, todos los productos cubiertos y los derechos humanos debidamente respetados.

Después de la reunión de hoy se espera que la presidencia francesa presione a los ministros de medio ambiente para que acuerden su posición antes de su próxima reunión el 28 de junio. El Parlamento Europeo también ha comenzado a redactar su posición y se espera una votación en el comité de medio ambiente el 11 de julio.

La sociedad civil se moviliza para frenar la deforestación inducida por la importación de soja

Ante la consulta pública lanzada por el Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico (MITECO) respecto de la futura ley sobre deforestación inducida por la importación de materias primas, las organizaciones Amigos de la Tierra, Ecologistas en Acción, Greenpeace España, Mighty Earth, SEO/BirdLife y WWF hacen un llamamiento a las empresas, sindicatos y asociaciones de consumidoras y consumidores, para participar en dicha consulta pública y reclamar una ley ambiciosa que frene la escalada de destrucción ambiental provocada por la expansión del sector agropecuario en los ecosistemas del planeta.(1)

La UE, debido a sus importaciones de productos agrícolas y ganaderos, es actualmente el segundo mayor responsable mundial de la deforestación tropical, solo superado por China. España sería, dentro de la UE, el tercer país europeo con mayor responsabilidad en este problema.(2)

“La futura ley debe garantizar a la ciudadanía europea que lo que hay en su cesta de la compra no está relacionado con la destrucción de la naturaleza o el abuso de los derechos humanos”, han declarado los firmantes. “Pero no podemos quedarnos mirando nuestro plato y nuestro ombligo. Para cumplir con el Acuerdo de París, los Objetivos de Desarrollo Sostenible o la Declaración Universal de los Derechos Humanos son necesarias políticas que sean coherentes con esos compromisos, aunque afecten a nuestro insostenible modelo productivo”.

El pasado 17 de noviembre la Comisión Europea presentó una propuesta legislativa para evitar la deforestación y la degradación de los bosques causada por la importación de productos agrícolas y ganaderos por los países de la UE. El proyecto de ley exigiría por primera vez que las empresas que venden determinadas materias primas en el mercado de la UE rastreen su origen y demuestren que no están vinculadas a la destrucción o degradación de los bosques.

Esta legislación obligará a las empresas a disponer de mecanismos para aplicar el Deber de Vigilancia (o Debida Diligencia) para minimizar los riesgos en sus operaciones de importación de soja, aceite de palma, cacao, café, carne de vacuno y madera, así como algunos de sus productos derivados. Una vez presentada la propuesta por parte de la Comisión, el próximo mes de febrero darán comienzo las negociaciones en el Parlamento Europeo y entre ministras y ministros de los Estados miembro. Se espera que sea la comisión de medio ambiente en el Parlamento Europea donde se tome la iniciativa a la hora de analizar el texto presentado.(3)

En relación con esta propuesta, el Gobierno español ha decidido in extremis (se comunicó el pasado 30 de diciembre) elaborar el Estudio de Impacto de la Propuesta Legislativa Europea en España. Y para la elaboración de este estudio es preciso establecer un proceso de participación pública para que la ciudadanía, grupos de interés, asociaciones empresariales y sindicales, expertas y expertos, o cualquier sector que se considere afectado por la propuesta legislativa, puedan expresar su opinión.

Para las organizaciones ecologistas, “el mercado europeo es uno de los más grandes del mundo, por lo que estamos ante una oportunidad única para que la UE lidere la lucha contra la deforestación inducida por la producción y comercio de materias primas como la soja. Es el momento de la valentía y la ambición y no de rebajar los requerimientos, algo que seguiría dejando en situación de vulnerabilidad a algunos de los ecosistemas vitales en muchas partes del mundo y a las comunidades que viven en su entorno”.

Las importaciones españolas de soja y la deforestación
La deforestación causada por la expansión del cultivo de soja en algunos países de América del Sur es uno de los aspectos cruciales que deben ser abordados por la ley que ahora ha presentado la Comisión Europea, ya que la UE es altamente dependiente de la importación de ingentes cantidades de soja para alimentar a la ganadería industrial.

La expansión del cultivo de soja en Brasil o Argentina no solo está relacionado con la deforestación, también con el acaparamiento de tierras, la invasión de territorios indígenas y otras violaciones de derechos humanos. Esta rápida expansión se ha producido a expensas de algunos de los ecosistemas con mayor biodiversidad en la Tierra, incluidos los bosques del Amazonas, el Cerrado y el Gran Chaco en América del Sur, y está contribuyendo a la crisis climática y de salud pública.

La expansión de este cultivo ha cambiado el uso del suelo de amplias superficies que antes eran ecosistemas o fueron utilizados para la producción de alimentos a pequeña escala. De este modo, muchas poblaciones campesinas e indígenas han sido desplazadas forzosamente de su territorio y obligadas a buscar otras tierras para sobrevivir.

Dentro de la UE, España destaca en cuanto a importación de soja y fabricación de piensos. En 2019, importó 2,4 millones de toneladas de soja brasileña, principalmente del estado de Mato Grosso y la región de Matopiba, ubicados en el bioma del Cerrado. Estas zonas son puntos calientes de biodiversidad devastados por la deforestación. Según datos del IDH (Sustainable Trade Initiative) referidos a 2019, tan solo el 1 % de las importaciones españolas de soja estaba certificada bajo el estándar del RSPO.

El 87 % de la soja importada por la UE se destina a la producción de piensos para la alimentación de ganado. Y España es, dentro de la UE, el líder en la producción de piensos, produciendo 34,5 millones de toneladas de piensos animales en más de 850 fábricas. Por este motivo, España es un punto estratégico para empresas que importan soja desde el continente americano para luego comercializar los subproductos (torta de soja y aceite) en el resto de Europa.

A partir de la soja importada se producen grandes cantidades de piensos que se destinan a la producción ganadera industrial orientada en gran medida a la exportación a terceros países de carne, derivados y subproductos animales, junto a animales vivos. Las importaciones de soja para la alimentación de la ganadería industrial son el principal motor de la deforestación inducida por el sistema agroalimentario español. (4) (5) (6)

Desde las organizaciones ecologistas se está contactando con sectores económicos y sociales para aumentar el rango de actores e intereses en esta consulta, para lo cual han elaborado una guía dirigida a facilitar la contestación del cuestionario.

La ley de lucha contra la deforestación en la UE supone un primer paso en la buena dirección

Este mediodía la Comisión Europea ha presentado su propuesta legislativa para minimizar la deforestación y la degradación de los bosques causada por las materias primas importadas a la UE. El proyecto de ley exigiría por primera vez que las empresas que venden determinadas materias primas en el mercado de la UE rastreen su origen y demuestren que no están vinculadas a la destrucción o degradación de los bosques. Sin embargo, la ley deja fuera otros ecosistemas distintos de los bosques, como las sabanas y los humedales, que son de gran importancia para la acción climática y la biodiversidad, y que no recibirán protección.

Además, la propuesta de la Comisión solo afectaría a un número limitado de materias primas y productos, ignorando los importantes vínculos con la destrucción de la biodiversidad por parte del comercio internacional de carne de cerdo y aves, el caucho o el maíz.

Para Amigos de la Tierra, Ecologistas en Acción, Greenpeace España y Mighty Earth, “por primera vez hay un rayo de esperanza de que la UE, uno de los mercados más grandes del mundo, pueda frenar su impacto destructivo en los bosques del mundo. Pero la Comisión Europea todavía ha dejado graves lagunas en la nueva ley que dejarían vulnerables ecosistemas vitales en muchas partes del mundo. Los gobiernos de la UE y el Parlamento Europeo deben endurecer la ley para que la gente pueda estar segura de que lo que hay en su cesta de la compra no está relacionado con la destrucción de la naturaleza o el abuso de los derechos humanos”.

Asimismo, las organizaciones ecologistas advierten que la propuesta de la Comisión Europea no requiere que las empresas que comercializan materias primas y productos cumplan con las leyes internacionales que protegen los derechos de los pueblos indígenas y las comunidades locales, dejándolos expuestos a abusos y violaciones de sus derechos. La propuesta tampoco aborda el impacto de las inversiones del sector financiero europeo en la deforestación y degradación de los ecosistemas del planeta.

Las importaciones españolas de soja y la deforestación
Amigos de la Tierra, Ecologistas en Acción, Greenpeace España y Mighty Earth hacen hincapié en que la deforestación causada por la expansión del cultivo de soja en algunos países de Sudamérica es uno de los grandes problemas que deben ser abordados por la ley que ahora ha presentado la Comisión Europea.

La expansión del cultivo de soja en Brasil o Argentina no solo está relacionado con la deforestación, también con el acaparamiento de tierras, la invasión de territorios indígenas y otras violaciones de derechos humanos. Esta rápida expansión se ha producido a expensas de algunos de los ecosistemas con mayor biodiversidad en la tierra, incluidos los bosques de Amazonas, Cerrado y Gran Chaco en América del Sur, y está contribuyendo a la crisis climática y de salud pública.

En 2019, el Estado español importó 2,4 millones de toneladas de soja brasileña, principalmente de los Estados de Mato Grosso y Matopiba, ubicadas en el bioma del Cerrado. Estas zonas son puntos calientes de biodiversidad devastados por la deforestación.

La expansión de este cultivo ha cambiado el uso del suelo de amplias superficies que antes eran ecosistemas o fueron utilizados para la producción de alimentos a pequeña escala. De este modo, muchas poblaciones campesinas e indígenas han sido desplazadas forzosamente de su territorio y obligadas a buscar otras tierras para sobrevivir. Según el propio sector fabricante de soja, España apenas importa soja que pueda considerarse “libre de deforestación”.

El 87 % de la soja importada por la UE se destina a la producción de piensos para la alimentación de ganado. Y España es dentro de la UE el líder en la producción de piensos, produciendo 34,5 millones de toneladas de piensos animales en más de 850 fábricas. Por este motivo, España es un punto estratégico para empresas que importan soja desde el continente americano para luego comercializar los subproductos (torta de soja y aceite) en el resto de Europa.

A partir de la soja importada se producen grandes cantidades de piensos que se destina a la producción ganadera industrial orientada en gran medida a la exportación a terceros países de carne, derivados y subproductos animales, junto a animales vivos. Las importaciones de soja para la alimentación de la ganadería industrial es el principal motor de la deforestación inducida por el sistema agroalimentario español. (1) (2)

Próximos pasos
Se espera que las negociaciones en el Parlamento Europeo y entre los ministros de los países miembros den comienzo en la primera mitad de 2022, y que sean los eurodiputados de la comisión de medio ambiente en el Parlamento Europeo los que tomen la iniciativa a la hora de analizar el texto presentado.

En 2020 los miembros del comité de medio ambiente ya elaboraron un informe que detalla cómo debería ser una legislación exitosa para frenar el impacto del consumo y las inversiones de la UE en los bosques del mundo, otros ecosistemas y los derechos humanos.